Los conveyors modulares utilizan bandas plásticas con diseño entrelazado, lo que permite curvas, inclinaciones y cambios de dirección sin necesidad de múltiples sistemas. Son resistentes a productos químicos, humedad y limpieza frecuente, lo que los hace ideales para entornos higiénicos o de fácil mantenimiento.
Aplicaciones comunes: industria alimentaria, farmacéutica, embotellado, líneas de lavado y empaque.